La Ingeniería Naval y Oceánica es el conjunto de técnicas y tecnologías que permiten la utilización y explotación integral de mares y océanos así como su conservación y el mantenimiento de sus ecosistemas.
El perfil del Ingeniero Naval se caracteriza por tener una altísima demanda en el mercado laboral. La participación en gran variedad de sectores industriales y de servicios (realizando multitud de trabajos distintos), una alta valoración en el mercado de trabajo (posee un amplio conocimiento técnico general y gran capacidad de aprendizaje que le permite desarrollar eficazmente cualquier tipo de tarea), y una tasa de paro prácticamente nula, incluso en situaciones de baja demanda (el 98.6% de los alumnos y alumnas que finalizaron sus estudios en la Escuela encuentran trabajo en menos de un año después de haber terminado).
Este amplio abanico de posibilidades expresa el que hoy y dentro de la Ingeniería Naval y Oceánica tienen cabida tecnologías emergentes que antes podía pensarse que estaban reservadas a otros sectores y además pone de manifiesto el que sus actividades industriales son altamente complejas desde un punto de vista tecnológico y con máximas exigencias de seguridad y calidad medioambiental.
- El proyecto y construcción de buques tanto civiles como militares, así como la operación y explotación de los primeros.
- La atención al mundo del ocio en sus demandas de marina deportiva y complejos turísticos flotantes.
- El diseño y construcción de complejos industriales y artefactos, flotantes y submarinos.
- La minería submarina.
- Los sistemas submarinos de distribución, proceso y comunicaciones.
- La robótica submarina.
- La pesca y piscicultura marinas.
- El aprovechamiento energético de vientos, olas, corrientes y gradiente térmico.
- Las plantas de desalinización y potabilización de agua marina.
- Las plantas flotantes de producción energética.